martes, 31 de enero de 2012

Lectura de la Realidad

Regresar a estudiar abre una amplia gama de posibilidades.
El "último" semestre de la carrera, tiene una carga importante de proyectos que deberían irse concretando y otros que se van abriendo.
Esto significa un reto o mejor dicho varios, así como ciertos análisis que vale la pena realizar.
Primero ¿elegí la carrera adecuada?
Me parece que ese cuestionamiento es difícil de contestar pues depende de muchas cosas y desata muchas otras preguntas como: ¿qué me gusta de lo que he estudiado? ¿por qué lo elegí? ¿cubre mis expectativas? entre muchas otras dudas que en mi caso, encuentran una respuesta diferente cada día.
Hoy, por lo menos, puedo decir que encontré una.
Esto lo he reflexionado por una experiencia que tuve el día de hoy y que me recordó una vez más el sentido de mi vida dentro de la carrera de pedagogía al pensar en uno de los motivos que incidió en mi decisión para formar parte de esta facultad : la oportunidad de conocer el trabajo y obra de Paulo Freire a partir de la voz de Miguel Escobar y poder llevarlo a la práctica en la alfabetización rural del Colegio Madrid.
 Esta fue una experiencia que antes de elegir la carrera, me hizo reflexionar sobre las posibilidades del ser humano de tomar conciencia de lo que le rodea, saber dialogar, vivir en libertad y sobretodo contar con las herramientas que le permitan leer la realidad y el mundo para transformarlo en conjunto con los demás; aspectos que junto con otros, sólo podían lograrse con la educación.
Así y por otros motivos en los que no abundaré en esta ocasión, decidí entrar a la carrera de pedagogía en la Universidad Nacional Autónoma de México.
Ahora, a 7 semestres y cachito de haber empezado y muy cerca de terminar, otra experiencia me permite pensar que voy por buen camino.

Hoy tuve mi primera clase como parte de un grupo coordinador dentro de un proyecto que lleva el nombre de Lectura de la Realidad en el aula (http://www.lrealidad.filos.unam.mx/) y que ha logrado articular una serie de ideas y practicas que confirman mi fascinación por la pedagogía y sus múltiples metodologías, caminos y sobretodo posibilidades.
Posibilidades para conocer personas maravillosas como las que forman parte del proyecto, pero sobretodo posibilidades de lectura de la realidad, siendo esto una de las cosas más importantes en la educación superior:  encontrar aquella visión que te guste y que te permita comprender lo que te rodea pero sobretodo enfrentarlo, gozarlo y si es necesario, para un bienestar propio y común, transformarlo.

Toda educación brinda una cosmovisión.
 ¿te gusta la cosmovisión que estas construyendo?

Hoy dentro de este grupo confirmé que me gusta, que voy por buen camino y que me falta mucho que recorrer.

Hoy las piezas que me hicieron entrar a la carrera se vuelven a acomodar y por cosas de la vida, en el proyecto al que me integré, de nuevo se encuentra Miguel Escobar, alguien que fue luz al principio del camino y lo está siendo al final junto con el equipo (Cora, Merary, Mayra, Luis, Felipe).

Hoy al sentirme parte del proyecto, de la facultad y de la carrera agradezco estar en dónde estoy y seguir encontrando caminos de construcción, participación, creatividad y todas esas posibilidades que nos mantienen vivos, bien y luchando lo más juntos posible.

sábado, 28 de enero de 2012

Con-ciencia

"No es mucha la gente que nace con esa incómoda glándula llamada conciencia, que impide dormir a pata suelta y sin otra molestia que los mosquitos del verano; pero a veces se da." 
Eduardo Galeano
 http://eduardogaleano.org/2012/01/20/el-crimen-y-el-castigo/


¿Será que la conciencia es algo con lo que se nace? 
Podría ser, sin embargo quiero pensar que sobretodo es algo que se debe construir y compartir y aunque hay quienes tienen la fortuna de haberla tenido desde el nacimiento y deben cuidarla y alimentarla, otros y otras deben encontrar las formas de que se desarrolle esa "incómoda glándula". 
¿Cómo? Supongo que hay muchas respuestas pero sobretodo muchas preguntas.
¿Por qué será incómoda?
Porque además de que requiere trabajo para que no se estanque, siempre debe de ir de la mano de la responsabilidad y eso a veces es difícil de lograr. El problema además es que mientras más consciente eres de lo que sucede a tu alrededor y aumenta tu responsabilidad más es lo que "tienes" que hacer;  en ese sentido se podría decir que una buena forma de comprobar que tu conciencia sigue creciendo y en realidad existe, es por medio de la acción.
¿Qué acciones demuestran la existencia de conciencia?
Por fortuna muchas (aunque a veces son más las que demuestran su ausencia) y en general se pueden identificar con varios criterios e incluyendo diferentes aspectos que siempre dependen de la realidad que se vive por lo que son relativas y en la mayoría de los casos caen en consensos.
¿Cómo llegar a consensos para "accionar" conscientemente?
Tal vez es es una de las preguntas más grandes.


Estos días, al reflexionar sobre lo que implica llegar al último semestre de la licenciatura en la Universidad Nacional Autónoma de México, creo que he encontrado una de las respuestas.
Accionar conscientemente se logra cuando: 1. te das cuenta de lo que tienes y de lo que te falta como persona para aprovecharlo y/o desarrollarlo  2. buscas las formas de mejorar lo que te rodea y 3. descubres que ambas cosas suceden con mayor éxito cuando al hacerlo no sólo piensas en tu propio beneficio. 
¿Estas de acuerdo?
Tal vez si, pero tal vez no y ahí está una de las cuestiones más importantes, a veces se llegan a acuerdos o consensos, a veces no, pero en la acción de intentarlo a través del diálogo ya va implícita una conciencia o varias y junto con ello varias responsabilidades.
Es decir que en la acción de dialogar con lo que todo ello implica ya va por lo menos algo de la "glándula incómoda"


Además, no estar cómodo o estar incómodo puede ser el primer paso para la acción.
Para el movimiento, ese quinto elemento del que hablan las civilizaciones indígenas, movimiento como búsqueda.


Así, los espacios que generan glándulas incómodas como la conciencia, son a su vez los que sirven para mejorar. 


Tal y como sucede con la UNAM y con esos lugares en los que se puede dialogar, llegar a consensos y desarrollar glándulas incómodas que al ser usadas con responsabilidad nos sirvan para mejorar-nos.









martes, 17 de enero de 2012

Trascender...naturalmente

El asombro es una de las mejores partes de la vida y muy probablemente una de las cualidades que todo ser humano tiene o debería tener.
 Se relaciona con sensaciones, ideas, creencias. Quita y da sentido a lo que sucede a nuestro alrrededor pues por lo general las cosas que nos producen asombro rayan en lo "irreal" o poco común, aunque al final son esas mismas cosas las que nos recuerdan todo lo que compartimos o "tenemos en común".


Los seres vivos nacen, crecen, se reproducen y mueren, eso si no mal recuerdo es lo que ocurre en un ciclo biológico “normal”. sin embargo, aún como seres vivos que somos, los seres humanos procuramos no acercarnos a cumplir ese ciclo tan simple tanto para distinguirnos de los animales y plantas como para distinguirnos entre nosotros. Y así vamos construyendo nuestra biografía. 
Ese conjunto de cosas que se mueven entre lo que podemos decidir y lo que no, y la amplitud de opciones que tenemos. ¿qué parte de nacer, crecer, reproducirnos y/o morir podemos elegir?
Es complicado y hay muchas teorías y pocas certezas que vayan más allá de lo que la ciencia nos permite saber.
Mi teoría, poco estudiada, pensada y lo más alejada de lo cientifico posible hasta ahora va asi:
Lo del nacimiento es cuestión de azar, la familia, medio, momento, lugar, etc, ocurre porque sí y ahí comienza lo interesante ¿qué hacemos con aquello que la vida nos ofreció por azar?
Podemos crecer, reproducirnos y morir también por azar o, buscar lo necesario para intentar ganarle al azar y decidir lo más posible lo que queremos de la vida. 
Algunos esto lo tienen más fácil que otros pues tienen más cerca eso que “necesitan” para elegir el rumbo de su vida, otros, son muchas las cosas que necesitan buscar y encontrar para elegir el rumbo.
Como sea lo que la vida les haya ofrecido, hay cosas que cualquiera puede decidir y esto tiene que ver con cómo vivir, qué actitud tener ante lo que la vida te ofrece.
¿cómo hacer para disfrutar la vida?
Una de mis respuestas hoy esta en abrir eso que nos conecta con la naturaleza, aquella que nos mantiene vivos y que tiene mucho que ofrecernos. 
La que nos permite nacer, crecer, reproducirnos, morirnos; pero sobretodo la que nos da la oportunidad de asombrarnos ante su belleza.
Esa capacidad de asombro innata del ser humano(que esta en su naturaleza), desde mi punto de vista así como puede ser un regalo, también es una forma de recordarnos el poder que tiene sobre nosotros, pues muchas veces podremos hacer como que la dominamos pero la realidad es que ante ella somos un tanto insignificantes, en cada hermoso paisaje en los que el ser humano ha tenido poco o nada que hacer, nos quedamos como simples espectadores y en mi caso cuestionándome constantemente cómo podemos vivir no sólo lejos de ella sino acabando con ella, transformándola en el mejor de los casos pero en la mayoría destruyéndola.
Tal vez esa sea otra de las cuestiones que estén en nuestra naturaleza, la necesidad de dominar al medio ambiente, como si con eso lográramos lo que muchos aspiramos, la trascendencia. 

Esa esperanza de que la naturaleza no nos gane y el ciclo biológico inevitable pueda no terminar en la muerte y  vivir para siempre.

Como si al dominarla pudiéramos lograrlo, sin entender que tal vez su existir es motivante y su belleza la culpable de tanta creación que se acerque al menos un poco a ese esplendor. 
¿Dominarla para liberarnos? 
¿Liberarnos para superarla? 
Superarnos para trascender.
¿Cómo? 
Aceptando que sin ella no somos, que trascender no es permanecer sino dejarnos ser con ella, con todo, para todos.

martes, 10 de enero de 2012

Tradición.es:

La tensión entre lo que somos y lo que queremos ser está entre lo que conservamos o queremos cambiar de nosotros mismos.
Aquello que existe y nos gusta, muchas veces logramos que se conserve. Así también si queremos modificar algo, desde mi punto de vista (y con un poco de influencia aristotélica), lo podemos hacer por medio de la acción, de preferencia repetitiva (hábitos) que nos hagan desarrollar o eliminar aspectos de nuestro carácter (desde el punto de vista de Aristóteles, el carácter puede ser moldeado con la implementación y/o eliminación de ciertos hábitos) y así vamos construyendo nuestra forma de ser.
Lo mismo ocurre dentro de las sociedades, las cuales desarrollan actividades que pueden convertirse en hábitos, lo que va construyendo las tradiciones.
Las tradiciones son parte de la cultura y de la historia de los países y como tal, van sufriendo cambios a lo largo del tiempo y de las transformaciones de los diferentes integrantes de la sociedad.
Así, en el mejor de los casos, se adaptan a las necesidades del momento.
Muchas veces sucede que los hábitos y tradiciones que van construyendo los caracteres y culturas son víctimas de la inercia, lo que hace que ocurran situaciones sin tener claros los fines e incluso los orígenes, lo que puede hacer que se pierda su esencia.
Saber por qué sucede algo (tradiciones) o qué hace que nuestro carácter sea de una u otra manera nos permite comprendernos mejor a nosotros mismos y conocer más sobre la cultura de la que formamos parte pero sobretodo nos permite construir o cambiar.

El derecho a preguntar es uno de los primeros que debe promoverse, para después conocer diversas respuestas y así un campo de acción.
¿Cual es la esencia de las tradiciones mexicanas? ¿a qué necesidades del momento responden?

Estos días de Cena Navideña, Fiesta de Año nuevo y Rosca de Reyes me permitieron reflexionar sobre la esencia de estas celebraciones, la cual de pronto puede confundirse con el simple consumo y presumo o compro para disfrutar, pues de pronto pareciera que las necesidades del momento tienen que ver con aspectos materiales. ¿Será?

La esencia de las tradiciones, desde mi punto de vista, así como el carácter, está en constante construcción pues su significado lo encuentra cada uno dentro de su núcleo social y/o familiar.

Lo que considero importante sería no dejarnos llevar por la inercia  y cuestionar más seguido por qué pasa una u otra cosa, somos de una u otra manera y si lo queremos seguir siendo; para así decidir nuestro carácter, nuestras tradiciones y al mismo tiempo nuestra historia.

¿Se ha vuelto tradición comprar?
Creo que sí.
Aunque también juntarnos y disfrutar-nos.

Que se vuelva tradición preguntarnos, construirnos y si es necesario cambiarnos.