viernes, 26 de julio de 2013

los viajes no caben en palabras

Los viajes no caben en palabras,
tal vez quepan en instantes que estremecen,
en tiempos cortos que recorren largas distancias.
en caminatas incansables, en rostros desconocidos que ayudan.

Un viaje no viene sólo, viene acompañado de recuerdos,
de fotografías que no se tomaron, de platillos que se saborearon
y de amigos que se hicieron, sólo se entiende en prospectiva y se asimila en perspectivas.

Si no confías en las personas no viajes.

Los nuevos caminos apagan los miedos, 
los miedos apagan los nuevos caminos,
Si viajas asegúrate de llevar todas tus partes pues no las vas a necesitar,
nuevas partes tendrás que inventar.

Cuando empiezas a viajar sabes que un día vas a terminar,
quizá cuando quieras, tal vez cuando no puedas más,
siempre cuando necesites volver a empezar.

Si terminas un viaje no sientas pesar,
siente lo demás, siéntete, siéntate,
y cuando te vuelvas a levantar,
ten por seguro que nada volverá a ser igual.

Los viajes no caben en palabras,
tal vez quepan en la piel.