lunes, 25 de marzo de 2013

paz: más justicia, menos violencia

En la vida tenemos conflictos permanentes, con nosotros mismos, con los demás, con lo establecido,etc. y la forma de enfrentarlos y resolverlos habla mucho de nuestras maneras de ser y concebir al mundo.
Hace una semana tuve la oportunidad de participar en un taller que llevaba por nombre "resolución no violenta de conflictos" en el marco del Encuentro de Juegos y Danzas Cooperativas para la Paz y la Solidaridad a cargo de Frans Limpens, en donde pude profundizar un poco más en este tema.
Cuando chocan intereses, valores o necesidades se puede decir que se está en conflicto; hablando de aquellos que son entre personas. Los cuales pueden ser con la pareja, algún familiar, jefe o desconocido que se cruza en nuestro camino.

Lo importante en estos casos es identificar cuál es el "meollo" del asunto, reconociendo aquellos intereses, necesidades o valores que están chocando y provocando alguna molestia.
Después de identificado esto, es indispensable que se separe el conflicto de la persona, es decir que se despersonalice para que sea más fácil abordarlo.
Las emociones están presentes en cada momento y son parte de la clave para resolver sin violencia los conflictos, si se saben manejar y expresar a tiempo pueden contribuir para el éxito, de lo contrario en ocasiones traen más problemas e inconformidades.
Una de las claves para la resolución de cualquier conflicto se halla en la comunicación, escuchar antes de dar cosas por hecho o interpretar, responder sin lastimar y tener claridad en lo que se dice, son algunos aspectos que deben considerarse. De ahí además es de gran importancia que se respeten los acuerdos a los que se lleguen.
Otro aspecto importante está en evitar caer en la victimización o culpabilidad de alguna de las partes del conflicto, lo que puede generar que se cargue más de uno u otro lado la responsabilidad y se pierda el objetivo, que sería la resolución del mismo.
Para resolverlo muchas veces es necesario que exista una negociación o lo que yo prefiero llamar diálogo, en el cual ambas partes se expresen y construyan soluciones que los dejen contentos, procurando que exista un "ganar" - "ganar".
Este diálogo debe estar en constante desarrollo en las relaciones, para monitorear los sentires de cada persona y fortalecer las relaciones para evitar conflictos futuros.

En la actualidad se observa que son muchos los conflictos que acaban en violencia pues a veces parece que es la forma que  nos han enseñado o el camino fácil para "resolverlos". Sin embargo esa debe ser una opción que no se encuentre en nuestro repertorio, la creatividad para descubrir nuevos caminos debe estar presente en todo momento.

Como seres racionales y emocionales con tantas diferencias,que además viven en un mundo lleno de desigualdades y situaciones que nos enfrentan, es muy común que tengamos conflictos, ya dependerá de nosotros si los aprovechamos como experiencias de aprendizaje, así como oportunidades para buscar que haya más justicia y menos violencia. Logrando con diálogo y paciencia que la paz esté con nosotros ;)

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